miércoles, 2 de septiembre de 2009

Repensando "realidades"

¡1 mes sin entradas! No vayan a pensar que estuve "disfrutando de la vida muy tranquilamente", nada de eso. Es que estuvimos trabajando en equipos dentro de entornos restringidos a los alumnos, bosquejando un proyecto... Pero, en fin, de eso ya hablaremos más adelante...

Hoy quiero, brevemente, compartir con Uds. mis líneas favoritas de dos lecturas asignadas ahora que hemos comenzado el módulo de "Tecnologías para el trabajo colaborativo"... ¡A ver qué les parecen!

La base de la convivencia humana es doble y, sin embargo, una sola: el deseo de todos los hombres de que los otros les confirmen como lo que son o incluso como lo que pueden llegar a ser, y la capacidad innata de los hombres para confirmar de ese modo a sus semejantes. (Watzlawickz, 1995:7)
Más allá de las nuevas tecnologías, sus posibilidades y desafíos, me pregunto: ¿cómo podremos construir esta convivencia en el aula?
Me digo: ¡ahora ya sé porque me encanta pertenecer a mis comunidades de práctica en la Red 2.0!
...nosotros no somos factores computarizables. Por un lado, estamos determinados
mediante las propiedades del sistema al que pertenecemos, pero también estamos en
condiciones de poder intervenir de modo autónomo y de generar cambios. (Watzlawickz, 1995:11)
No es una "verdad" que me sorprenda, ¡pero nunca demasiado repetida!

De Piscitelli (2004:9) me queda "picando" esta pregunta:

¿De quiénes son los recursos disponibles en la Red que de pronto son esclavizados o apropiados por terceros?
Y me da vueltas y vueltas esta imagen que incluyó de Ugarte en su genial libro:



Veremos qué respuestas y nuevas preguntas surgen al continuar leyendo el módulo...

Gladys


BIBLIOGRAFÍA:
de Ugarte, David; "El poder de las redes". Disponible en
http://www.deugarte.com/gomi/el_poder_de_las_redes.pdf

Piscitelli, Alejandro (2004); "La Web como sistema virtuoso/vicioso" Disponible en : http://www.cibersociedad.net/congres2004/grups/fitxacom_publica2.php?grup=99&id=676&idioma=es
Watzlawick, Paul (1995); "El sinsentido del sentido"; Herder; Barcelona.